Un familiar se ha hecho con un dron, así que hace unas semanas tuvimos la suerte de poder probar uno de estos aparatos que tan de moda están últimamente. Concretamente estuvimos disfrutando de unas horas de vuelo con el modelo DJI Phantom 2, uno de los más populares.
Estos aparatos disponen de varias hélices (en este caso cuatro) muy potentes que, unido a la brújula y gps integrados, hace que se pueda mantener en el aire completamente estático, incluso con viento. De hecho incluso se pueden programar rutas de vuelo, para que las realice por sí solo… pero lo divertido es controlarlo uno mismo :)
Gracias al mando de control podemos realizar movimientos en cualquier dirección: girar sobre su propio eje, arriba, abajo, hacia delante, hacia detrás y lateralmente, por lo que las posibilidades son infinitas.
Si a estas posibilidades le añadimos una cámara GoPro de buena calidad y un sistema de estabilización de tres ejes podemos conseguir videos espectaculares y de gran calidad. De hecho esta combinación se usa mucho en videos profesionales que se pueden encontrar por internet.
Como decimos es muy divertido de manejar, aunque al principio cuesta hacerse con los controles. Esperamos poder mostraros algún video interesante en breve, para que veáis las increíbles posibilidades que tiene.
PD: Si, le hemos tenido que tunear el tren de aterrizaje para que la cámara no se quedase tan cerca del suelo al aterrizar. Un fallo de diseño… o un truco para que te compres unas patas diferentes, que casualmente tiene a la venta la marca…