Hemos estado pensando un titulo más elaborado para el artículo, pero finalmente hemos decidido que la nieve tiene bastante entidad por si sola como para quedarse con todo el título para ella, ¿no os parece?
Y es que pocas cosas hay que llenen tanto de felicidad como levantarse por la mañana, asomarse a la ventana y ver un grueso manto de nieve cubriendo todos los tejados. Siempre que no vivas en Laponia y estés acostumbrado, claro :)
Tuvimos la suerte de que coincidió con un día festivo (el día de Andalucía), por lo que pudimos disfrutar de la nieve y hacer fotos (y muñecos de nieve) sin prisa. Un día redondo, sin duda. Digamos que ha sido una forma perfecta de empezar a despedir este frio invierno.
Como podéis comprobar en las fotografías, las plantas de la terraza también disfrutaron lo suyo. Aunque también es cierto que alguna sufrió un poco el peso de la nieve en sus ramas. Pero bueno, daños menores.
Y vosotros, ¿tuvisteis la suerte de disfrutar de la nieve?