Nos encantan los aparadores, y si tienen un poco de historia, pues mucho más. Es el caso de este mueble aparador Philips de los años 60 que se han comprado unos amigos. Originariamente se trataba de un mueble pensado para tener la televisión dentro, y así poder cerrar y mantenerla protegida y fuera de la vista, pero ahora se ha convertido en un práctico aparador con mucho espacio de almacenaje.
Con este artículo queremos «matar dos pájaros de un tiro». Por una parte, queremos participar por primera vez en uno de los desafíos que realiza regularmente el blog Blad decoración, y que en esta ocasión consiste en mostrar la pared favorita de tu casa. Y, por otra parte, también aprovechamos para enseñaros el nuevo rincón que «nos ha salido» en el salón, después de mover unos cuantos muebles y reestructurar el espacio. La verdad es que aún no está definitivo (de hecho el cuadro va a ser sustituido por algo mucho más freak), pero nos gusta el rumbo que está…