¿Qué te parecería tener un ambientador que haga que tu casa huela a campo? ¿Y si encima es totalmente natural? Pues es bien sencillo! Lo único que necesitas son unas ramas de romero fresco y medio limón. Introduce el romero y el limón en rodajas (o gajos) en una olla, y cubre con agua. Llevalo a ebullición y dejalo a fuego medio durante el tiempo que quieras. Mientras el agua esté hirviendo, tu casa se irá llenando de una increíble fragancia a romero. Si empieza a quedarse sin agua, simplemente echale un poco más… podrás usarlo, al menos, un par…