Bueno, en realidad ni tenemos oficina ni es una chica. Se trata de una nueva cámara fotográfica, que ha llegado para sustituir a nuestra querida y amortizada Nikon D80 y brindarnos nuevas y prometedoras funciones y posibilidades.
Tras el complejo nombre Olympus OMD EM-10 se esconde una cámara digital con un aspecto retro que nos encanta, pero que no es su única virtud, ni mucho menos.
Estabilizador de tres ejes (perfecto para realizar fotografías bien enfocadas a velocidades bajas) grabación de video, objetivos intercambiables, y muchas funciones que nos harán la vida más fácil.
Pero sin duda el mayor avance respecto a una réflex digital convencional es la ausencia de espejo, lo cual hace que el cuerpo y los objetivos sean bastante más pequeños y ligeros. Ahora da menos pereza llevarse la cámara a todas partes. Incluso para fotografiar las recetas es mucho más cómoda, gracias a la pantalla abatible :)
En fin, que llevamos unos meses disfrutando como niños pequeños y aprendiendo a sacarle todo el jugo y la verdad es que estamos muy contentos con el salto que hemos dado.