Los que sois asiduos de esta Casa ya sabéis que nos encanta la buena música y, a ser posible, en vinilo. En parte es por la calidad de sonido, pero también por la parafernalia de colocar los discos, darle la vuelta, colocar la aguja…
El caso es que, poco a poco, hemos ido ampliando nuestra pequeña colección de discos, por lo que nuestro querido rincón musical se nos estaba quedando pequeño. Así que nos hemos liado la manta a la cabeza y hemos renovado el rincón musical cambiando el mueble por otro más alto (y más bonito).